Estimados amigos en Cristo:
Muy pronto, durante el fin semana Diciembre 9-10, nuestras parroquias llevarán a cabo la colecta del Fondo para la Jubilación de Religiosos que hacemos anualmente en beneficio de unos 32,000 religiosas, hermanos y sacerdotes, miembros mayores de las órdenes religiosas católicas.
Nuestros religiosos mayores son un tesoro. El fruto de su dedicación y arduo trabajo fue la fundación de las escuelas, hospitales y numerosas organizaciones para servicios sociales católicos. En la actualidad muchos continúan realizando ministerios como voluntarios. Su oración y testimonio continuo enriquecen nuestra fe de maneras innumerables. Estoy agradecido por el servicio de los religiosos, tanto de ahora como del pasado. Seguro que ustedes también recuerdan a un hermano o hermana que influyó de manera positiva en su vida.
Muchos religiosos mayores sirvieron durante muchos años recibiendo estipendios muy bajos que dejaron una gran carencia en los fondos para su jubilación. Los costos en aumento de la atención médica y los ingresos a la baja agravan el desafío de hacer frente a tales necesidades diarias como medicamentos y asistencia de enfermería. El Fondo para la Jubilación de Religiosos ofrece apoyo financiero que ayuda a las comunidades religiosas a brindar atención esmerada para los miembros mayores mientras asegura que los más jóvenes puedan continuar las buenas obras de aquellos miembros que les precedieron.
Entiendo que a ustedes les piden que apoyen muchas causas valiosas. Los invito a donar lo que puedan. Muy en particular, les pedimos que rueguen a Dios para que bendiga a todos los religiosos. ¡Tengan la seguridad de que ellos están rezando por ustedes!
Atentamente en Cristo,
Reverendísimo Dennis J. Sullivan,
Obispo de Camden