En la noche del 8 de septiembre, la comunidad parroquial de Santa Clara de Asís se reunió afuera de la Iglesia de San José en Swedesboro para honrar a Nuestra Señora de Guadalupe, con la bendición y dedicación de una nueva gruta parroquial a la Patrona de las Américas.
“Esta gruta es una muestra de devoción a nuestra fe, (para ayudarnos) a acercarnos más a Dios”, dijo Claudia Trani-Melgar, directora de comunicaciones de la parroquia, y coordinadora del Ministerio Hispano.
La devoción a Nuestra Señora de Guadalupe se remonta al siglo XVI, cuando se apareció a San Juan Diego en el Cerro del Tepeyac en México, como muestra de su amor y protección a los marginados.
La gruta, completa con una estatua de Nuestra Señora de Guadalupe, fuente, rocas, patio, rosas y una oración de consagración a la Santísima Madre, es el fruto de dos eventos separados que tuvieron lugar recientemente y fueron diseñados para crear Discípulos Misioneros: el V Encuentro Nacional para Católicos Hispanos y la propia Convocatoria de Líderes Católicos de la Diócesis de Camden.
De acuerdo con el deseo de la parroquia de fomentar “una parroquia, una comunidad” entre sus fieles, la nueva iniciativa Mariana “unificará a la comunidad para crear un espacio de integración y veneración común, y mostrará que todos son bienvenidos”, dijo Trani-Melgar.
Nuestra Señora de Guadalupe puede ser un apoyo e intercesora ante su hijo, Jesús, para “los inmigrantes, los pobres, las madres necesitadas y todas las personas que necesitan apoyo”, agregó.
Trani-Melgar elogió el trabajo de los feligreses y el clero que hicieron posible la gruta, ya sea a través del trabajo o de la recaudación de fondos.
“Ladrillo a ladrillo, la construimos”, dijo.
Cada marca del progreso de la estructura demuestra que su creación “fue en el tiempo de María, no en el nuestro”.
La gruta en sí fue construida en mayo, el mes de María. La estatua de Nuestra Señora de Guadalupe, procedente de México, fue instalada el 15 de agosto, fiesta de la Asunción de María. La bendición y dedicación fue el 8 de septiembre, fiesta de la Natividad de la Santísima Madre.
Su instalación también se produce en el décimo aniversario de la creación de la parroquia, como una fusión entre la parroquia de San Miguel en Gibbstown; Parroquia de San José; y la parroquia de San Juan en Paulsboro. Entre el clero presente en la Misa, bendición y dedicación estaban el Padre Edward Kennedy, administrador de la parroquia; el Padre John J. Franco Cardenas, vicario parroquial; y el Padre David Grover, ex párroco.